Pedro Sena, director diocesano de Cáritas, advirtió acerca de la creciente demanda de ayuda en comedores y merenderos de Concordia. “Nosotros no velamos únicamente por Concordia, sino por toda nuestra diócesis», aclaró y detalló que gracias a Cáritas Nacional y al Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), recibieron alimentos destinados a familias necesitadas. “Vemos una triste realidad: cada vez más personas se suman a los comedores”, remarcó.
En diálogo con el programa «Lo que queda del día», en Oíd Mortales Radio, Sena explicó que la demanda ha crecido de manera alarmante: “Antes teníamos cientos de personas, pero la cifra sigue subiendo. Muchos comedores y merenderos ya no reciben asistencia como antes y varios han tenido que cerrar». Añadió que Cáritas mantiene una red de voluntarios que no solo proveen alimentos, sino que también ofrecen apoyo en otras áreas.
Cáritas, además, realiza censos para actualizar su registro de familias beneficiarias y así enfocar mejor los recursos. “A principio de año teníamos un promedio de 60 familias en ciertas comunidades, y hoy tenemos 180, porque no logran llegar a fin de mes. La situación económica y las malas cosechas han dejado a muchos en una situación crítica”, detalló.
Subrayó que Cáritas no solo distribuye alimentos y ropa. “La misión de Cáritas es la promoción humana. Queremos que las personas puedan recuperar su dignidad, tener trabajo, documentos, acceso a educación y otros derechos básicos. En algunas parroquias se han levantado viviendas y realizado ferias para ayudar a cubrir estas necesidades”, reseñó.
Respecto del aporte del Estado, reveló que «hubo muchas asistencias que estuvieron cortadas, pero se fueron abriendo o están surgiendo nuevamente. A Cáritas por ser la institución con más transparencia, como lo llaman muchos, no nos han cerrado el convenio», reconoció.
Lo que no se pudo es «abrir espacios nuevos», lamentó. Contó, no obstante, que «hace poquito nos mandaron un importante desembolso de mercadería y a su vez recibimos por intermedio de esta comisión de voluntariado, de la Red de Instituciones, unas donaciones que las trajo el ex intendente Enrique Cresto con otras personas y nos pidieron a Cáritas que hagamos la distribución de los alimentos en las comunidades o aquellos lugares que nosotros sabemos que están funcionando, brindando este servicio, que no sean únicamente relacionados a la iglesia», detalló.
Acerca de la cantidad de personas que participan de Cáritas, dijo «yo por ahí en estos momentos soy la cara visible, pero hay un gran voluntariado en las parroquias y gente que no es de parroquia, que está haciendo esta labor, este servicio, esta entrega. Todos los que están en Cáritas brindan su tiempo cuando pueden, cuando están disponibles, sin esperar nada a cambio», remarcó.
Agregó que «lo principal es esto: El fundamento de Cáritas es la promoción humana. No es la asistencia, ni es la ropa, que bienvenidas sean, que surgió (de esta manera) por una necesidad concreta», expresó pero advirtió que «creo que sería muy malo si seguimos dentro de dos años, con la misma cantidad y sumando gente, asistiendo económicamente o con alimento o con ropa».
«Nosotros apuntamos a la promoción humana», insistió. «Por eso dentro de Cáritas hay convenios de clases de apoyo, hay primera infancia, se acompañan los adultos mayores, hay infinidad de cosas dentro de Cáritas que por ahí no se conocen. Pero la principal acción de Cáritas es la promoción humana», reiteró.
Sena también habló sobre el trabajo conjunto con instituciones de diversos credos y sectores. “Tenemos convenios para la construcción de viviendas en sectores vulnerables, en colaboración con el municipio y la Fundación Techo. Cáritas trabaja en red con muchas instituciones, incluso con quienes no comparten nuestra fe, pero sí nuestro objetivo: la dignidad de las personas”, expresó.
Finalmente, Sena hizo un llamado a quienes deseen colaborar: “Concordia no se conmueve únicamente, sino que se mueve. Concordia es una ciudad muy solidaria. Cualquiera que quiera ayudar puede acercarse a su parroquia o a nuestra sede en La Paz 831, donde se atiende de 8 a 12 y de 16 a 20. Cáritas es un mundo que necesitaría muchas charlas para abarcarlo por completo”.
Completó que «lo que aconsejamos a quien quiera colaborar es que se acerque a su comunidad parroquial y arrime lo que quiera, o se pueda presentar y diga ‘estoy disponible para esto o cómo puedo acompañar un fin de semana’, primero en la comunidad que le corresponde».
Afirmó para terminar que «muchos creen que Cáritas es un grupito más, que es una pastoral más, y Caritas atraviesa a toda la iglesia. Una vez me dijo un sacerdote que nosotros éramos los bienes de los más pobres y me resultó, guau, qué compromiso tenemos todos los que estamos acá».