
Los Institutos de Educación Superior y de Formación Docente públicos de Entre Ríos se encuentran movilizados ante la amenaza del gobierno provincial de Frigerio de cerrar carreras a partir del ciclo lectivo 2026.
El ataque a la Educación Pública estatal es una política sostenida tanto por el gobierno nacional, como el provincial. Esto se traduce en bajos salarios docentes, cierre de escuelas rurales, cargos de nivel inicial y primario, orientaciones y horas de formación complementaria y de acompañamiento a trayectorias en el nivel secundario y cursos y horas de la educación de jóvenes y adultos. Así como también, en la falta de presupuesto para funcionamiento y la falta de inversión en reparación y construcción de infraestructura escolar.
A esto se suma la intencionalidad del gobierno de Milei y todos sus aliados, de imponer por un lado la reforma laboral, que pretende cercenar directamente derechos laborales conseguidos en más de 100 años de lucha, y por otro, la reforma educativa, que busca desligar al estado de toda su responsabilidad para garantizar el derecho a la educación pública y gratuita de toda la población.
En este contexto, desde el Consejo General de Educación provincial, se ha comunicado recientemente a los Institutos de Formación Docente y Técnicos que sólo se autoriza la inscripción efectiva de estudiantes para el ciclo lectivo 2026 (y solo por una cohorte) en los profesorados de planta permanente y en todas las tecnicaturas, pero no se habilitó la continuidad a los profesorados de planta temporaria, que son más de 30 en toda la provincia. El agravante de esta situación es que no solo pretenden cerrar carreras que ya eran inestables en el sistema formador, sino atacar a aquellas que tienen más de 100 años, como los Profesorados de Educación Primaria de las históricas Escuelas Normales, o carreras con años de tradición en cada departamento de la provincia, con el argumento de que ni los profesorados son de planta permanente ni las horas pertenecen a los institutos, sino que todas las horas (permanentes y temporarias) pertenecen al Consejo General de Educación, y por lo tanto es desde allí que decidirán a qué institutos y/o departamentos de la provincia se destinarán, atendiendo a una lógica mercantilista, que pretende medir a docentes y estudiantes en términos de déficit y superávit.
Es importante destacar que estas problemáticas no son nuevas en el nivel superior de la provincia, ya que la mayoría de los institutos poseen carreras “a término” o de planta temporaria con más de 10 años de funcionamiento, que dependen de la voluntad política de los gobiernos de turno para tener continuidad, imposibilitando la estabilidad laboral de quienes trabajan en el nivel y la proyección a futuro de las comunidades educativas. Lo mismo sucede con las carreras llamadas “de planta permanente”, ya que hace más de 15 años que no se titularizan horas y/o cargos en el Nivel.
Otro reclamo histórico de los profesorados es la falta de edificios propios y la autonomía de funcionamiento en cuanto a horarios y propuestas de formación inicial y continua.
Esto ha generado una movilización inmediata de las comunidades educativas de los institutos terciarios, convocando a reuniones, asambleas, actividades y movilizaciones para visibilizar la grave situación y exigir al gobierno de Frigerio la continuidad de todas las carreras, en defensa de la educación pública y la estabilidad de las/os docentes que se desempeñan en el Nivel Superior, para poder garantizar las trayectorias de los estudiantes que ya están cursando dichas carreras y aquellos que se han pre-inscripto para cursar el próximo año.
Lo que queda claro en estas políticas es que la educación pública estatal en los niveles obligatorios y sus modalidades, así como la educación superior pública, gratuita y de libre acceso, son un blanco de ataque permanente de los gobiernos, que buscan su deterioro progresivo con el fin de privatizarla y convertirla en una mercancía más del sistema capitalista, al que se alinean todos los gobernadores junto al presidente Milei.
Por todo esto y entendiendo que si atacan a un nivel atacan a todos, desde Tribuna Docente estamos impulsando movilizaciones en toda la provincia y exigiendo a la conducción de nuestro sindicato AGMER que convoque a asambleas y paro, para construir en conjunto un plan de lucha y exigir en forma inmediata:
Continuidad y pase a planta permanente de todas las carreras terciarias públicas.
Estabilidad laboral y titularización de horas cátedra y cargos de Nivel Superior.
Edificios propios y en condiciones.
Mayor presupuesto para educación pública, para becas estudiantiles y para formación docente continua, gratuita, científica y laica. Que el estado deje de financiar la educación privada y religiosa.
Salarios básicos que superen la línea de pobreza.
¡NO A LAS REFORMAS LABORAL, JUBILATORIA Y EDUCATIVA!

