El chico tiene una pequeña huerta para poder llevar un sustento a su casa. «Es inadmisible e imperdonable, por qué no se ponen a trabajar como hizo este niño», manifestaron allegados al mismo.
«Que pena y mala acción de las personas que robaron los zapallos y todas las sandías de Martín, que él había plantado en Villa Adela y tenía para la venta en un terrenito de su casa», cuestionaron allegados a un niño concordiense.
El chico tiene tan solo 12 años y tiene una pequeña huerta para poder llevar un sustento a su casa y lo hace trabajando.
Consideran de muy fuera de lugar lo realizado y señalan que ocurrió el últimos miércoles, a la noche. Los amigos de lo ajeno se apoderaron de toda la cosecha. «Es inadmisible e imperdonable, por qué no se ponen a trabajar como hizo este niño», precisa la denuncia en la red social, por parte de una mujer indignada por lo ocurrido.
Fuente: Diario El Sol
