Mataron a un gremialista en medio de una pelea por el bono de fin de año.

El secretario general del Sindicato de Pescadores de Santa Fe, Juan Carlos Billareal, fue asesinado en medio de un puja por un bono salarial de fin de año para los afiliados del gremio.

El crimen ocurrió en la localidad de Puerto Gaboto, a 80 kilómetros de Rosario. Un pescador le disparó luego de una fuerte discusión que había derivado, en un principio, en una pelea a golpes de puño.

El secretario general del Sindicato de Pescadores de Santa Fe, Juan Carlos Billareal, fue asesinado en medio de un puja política por un bono salarial de fin de año para los afiliados del gremio. El crimen ocurrió en la localidad de Puerto Gaboto, a 80 kilómetros de Rosario. Un pescador le disparó luego de una fuerte discusión que había derivado, en un principio, en una pelea a golpes de puño.

En el caluroso mediodía de ayer, una veintena de pescadores se reunieron con las autoridades de la Comuna de Puerto Gaboto. El eje del debate fue el bono de fin de año que reclamaba el sector. Ante la negativa de las autoridades el secretario general del sindicato, Juan Carlos Billareal, salió y se juntó con los trabajadores en la plaza para debatir cómo continuar el plan de lucha. Pero un entredicho generó un malestar y uno de los participantes de la asamblea buscó un arma de fuego y arremetió a sangre fría contra el gremialista, que recibió dos disparos y murió desangrado poco después camino al hospital, indica La Capital.

Pasadas las 11 de la mañana de este viernes, una veintena de pescadores locales y del distrito costero de Alto Verde, vecino a la capital provincial, acompañados por Billarreal se acercaron a la Comuna de Puerto Gaboto. El día anterior, el organismo público había difundido en su cuenta oficial de Facebook un comunicado en el que ratificaba que iba a acompañar a los vecinos con bolsones, pero que no iba a haber bono navideño para los trabajadores de la pesca como se hizo años anteriores. La reunión era esperada y el ambiente de la negativa predisponía a una posible negociación dura.

Finalmente, durante el encuentro se les repitió: «No hay fondos para afrontarlo». La presidenta comunal, Sandra Aguirre, detalló: «Tuvimos una reunión por el bono de 1.500 pesos que pretendían pero realmente estamos en una situación muy complicada. Gaboto es una localidad muy precaria y recién ahora logramos ponernos un poco de pie, pero nos cuesta mucho. Hay más de 250 pescadores y se nos hace imposible pagar ese monto. En ese sentido, les recordé que entregamos 900 bolsones de comida y les sugerí que podía aportarlo el gremio en diciembre y nosotros poner una cuota en enero, cuando tengamos más posibilidades económicas».

De la Comuna a la plaza:

Hasta ese momento el diálogo parecía el de una negociación habitual. Pero en un momento un hombre irrumpió en el recinto y señalando al secretario general del gremio le reclamó en tono elevado la deuda que tenía con ellos o el desentendimiento económico en el que estaban. El ambiente se puso tenso y Billarreal atinó a responder: «Eso lo arreglamos afuera». Luego, continuó la cita sin resultados positivos, los hombres se retiraron y se agruparon en la plaza principal, frente a la sede comunal.
En ese contexto, se produjo un nuevo entredicho con la misma persona que poco antes había irrumpido en el salón de la Comuna. El hombre se retiró y Billarreal siguió debatiendo cómo continuar el plan de lucha de acuerdo a las reglas políticas planteadas en la reunión que acababa de concluir.

De acuerdo a la reconstrucción policial a la que acudió este medio, a los pocos minutos el hombre con el que había discutido Billarreal regresó en un auto y con un arma de fuego. Le disparó dos veces a quemarropas impactando en las piernas del sindicalista, quien reaccionó corriendo hacia donde se encontraba el agresor. La primera actitud fue la de sostener una riña, pero las balas le generaron una hemorragia que lo derribó en el verde de la plaza. Hay quienes indican además que una vez tendido en el piso, el otro hombre regresó y le propinó un fuerte culatazo en la cabeza para luego huir corriendo.

Traslado urgente:
La comisaría 12ª de la localidad está ubicada frente a la plaza central, a pocos metros de la Comuna. Inmediatamente se llamó a las autoridades policiales para que concurran al lugar del hecho, derivando en primera instancia a Billarreal para su rápida atención médica en la ambulancia del Samco hacia el hospital de baja complejidad «Federico Meroi», en Maciel, y poco después hacia el «Granaderos a Caballos» de San Lorenzo. Pero la gran pérdida de sangre sufrida le generó al sindicalista problemas cardíacos que derivaron en su muerte alrededor de las 13.

Mientras tanto, el hombre sindicado como autor del hecho logró escapar y anoche todavía era buscado. En el lugar del homicidio estuvo realizando pericias personal de la Policía de Investigaciones (PDI) y hasta el mismo jefe de la Unidad Regional XV, Ramón Giménez, quien detalló: «La pelea se dio en la plaza y había gente, estamos intentando localizar al autor y a los testigos. Sabemos que no intervino nadie más, pero que muchas personas los vieron».

Las directivas del proceso de investigación las lleva adelante el fiscal Juan Carlos Ledesma, del Ministerio Público de la Acusación con sede en San Lorenzo, quien ordenó el pedido de captura del agresor, la requisa de los vehículos que ingresan y salen de la localidad, como así también estableció un sistema de control sobre las costas para evitar una posible fuga hacia las islas.

Por su parte, la jefa comunal se mostró indignada: «La persona que creemos que disparó es conocida en el pueblo, hace más de diez años que llegó a la localidad y siempre se dedicó a la pesca». Y lamentó: «Este es un pueblo con necesidades, y entendemos que la situación que viven los pescadores es muy difícil pero nunca pensamos que el pedido de un bono pudiera terminar llevándose una vida».

Los móviles:
Con el correr de las horas comenzó a circular una cadena por redes sociales y mensajes. Así, una treintena de vecinos decidieron manifestarse ante la sede de la comisaría con varios planteos. «Es increíble lo que pasó», ponderaban.

Su familia se acercó a dialogar con los vecinos que acudieron a su apoyo en el difícil momento: «Mi papá tiene el baúl del auto lleno de bolsones navideños, era para los trabajadores, su objetivo fue siempre el trabajo social», reforzó una de sus hijas. Minutos después, y al pedido de no hablar con la prensa, la señora de Billarreal agradeció a los presentes y cuestionó: «No creo en la policía ni en la Justicia, sino en la justicia divina».

La conmoción fue general, y no tardaron en aparecer las versiones y discusiones como parte de la escena. Según narraban habitantes de la localidad podría no ser la reunión con la Comuna el móvil del crimen sino inconvenientes previos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio
Abrir chat
1
Hola! ¿En que podemos ayudarte?
Hola! ¿En que podemos ayudarte?