Françoise Hardy, estrella francesa de renombre internacional, ha fallecido a los 80 años, según anunció su hijo Thomas Dutronc en sus redes sociales. La emblemática artista de los años 60 llevaba diez años luchando contra un cáncer de garganta.
Somos muy pocas cosas, y mi amiga la rosa me lo ha dicho esta mañana”, cantaba con su voz melancólica, y su rostro que seguía siendo elegante y pícaro a través de los años, Françoise Hardy vivió mucho más que una rosa. Su hijo Thomas Dutronc anunció la muerte de esta estrella de la música francesa de fama internacional a los 80 años: “Maman est partie” (Mamá se ha ido), publicó en Internet, junto a una foto suya de niño con su madre.
En la clasificación de la revista estadounidense Rolling Stone de los 200 mejores cantantes de todos los tiempos en 2023, era la única representante de Francia. Joven de belleza hechizante, fue sin embargo una adolescente compleja que sólo encontró la salvación en la música. Alcanzó el éxito a los 18 años, en 1962, y se convirtió rápidamente en un icono de los adeptos al estilo yeyé.
El primer cáncer apareció en su vida en 2004, adoptando varias formas y dándole una existencia de pesadilla. En una rara entrevista concedida a la revista francesa Paris-Match en diciembre de 2023, declaró que deseaba “partir hacia la otra dimensión lo antes posible”, “partir pronto y rápido, sin demasiadas penurias, como no poder respirar”, y que era partidaria de la muerte asistida y la eutanasia.
Como declaró a la AFP en 2021: “Dejar que alguien con una enfermedad incurable sufra insoportablemente hasta morir es inhumano”.
A los 18 años, escribió y compuso un éxito comercial, algo poco frecuente en 1962
¿Qué recuerdos le quedarán? Su éxito “Tous les garçons et les filles” (Todos los chicos y chicas), su delicada voz, la intrigante pareja que formó con Jacques Dutronc… Pero eso no es todo. También fue la embajadora de la elegancia pop a la francesa e internacional, un “ideal femenino” para Mick Jagger, una figura de fantasía para Bob Dylan y David Bowie.
Todo comenzó para la artista en 1962 con el éxito inmediato -más de 2 millones de copias vendidas- de “Tous les garçons et les filles”, que ella escribió y compuso, un hecho insólito en aquella época. Tenía 18 años y era su primer álbum. Françoise Hardy, llena de contradicciones, estaba allí: llegó en plena ola yéyé, pero no encajaba realmente en la etiqueta.
En esta época despreocupada, su melancolía aflora: “Sí, pero salgo sola a la calle, con el alma en pena. Sí, pero voy sola, porque nadie me quiere.
Como invitada a uno de los programas de RFI en 2012, explicó que nunca pudo soportar su gran éxito, porque la canción “estaba extremadamente mal hecha”.
Aparte de este éxito, el público recordará su delicada voz y la intrigante pareja que formó con Jacques Dutronc (de su unión nació Thomas, que también se hizo cantante como sus padres). Pero eso no es todo.