SU PRESIDENTA RENUNCIÓ – La cadena española informó que la alta inflación de Argentina complicará aún más sus resultados globales. Suspendió reparto de dividendos en 2019.
La cadena de supermercados de origen español Dia no logra salir de su laberinto. Ayer vivió una jornada de turbulencias luego de anunciar que debido a la caída de ventas rebajará sus estimaciones de ganancias para el presente ejercicio. De esta manera, su acción cerró en la Bolsa de Madrid con una caída de 42,22% en un solo día. Quedó en mínimos históricos, alrededor de 1 euro.
«Atendiendo a una caída del volumen de ventas, que también ha impactado el margen bruto, y a un incremento de los gastos operativos, la Sociedad estima que el EBITDA ajustado -resultado antes de impuestos- previsto para 2018 se situará en un rango entre 350 y 400 millones de euros, comparado con 568 millones de euros en 2017», detallaba la compañía en un aviso a la Bolsa española, al tiempo que anunciaba además que su presidenta, Ana María Llopis, renunciaba a su cargo.
Tan repentino fue este cambio de timón que tuvo que asumir el cargo provisoriamente el hasta entonces vicepresidente primero Stephan DuCharme. Ahora la compañía busca reacomodar su junta directiva.
Pero esto no es todo porque las malas noticias se seguían desencadenando y la situación económica argentina se lleva un capítulo aparte en las ya pobres proyecciones del grupo español: «La estimación anterior no incluye el impacto que pudiera derivarse de la inminente aplicación de la norma contable IAS 29 para economías hiperinflacionarias que será de obligatoria aplicación para la Sociedad y su grupo desde el tercer trimestre de 2018 debido a su actividad en Argentina. Con motivo de la publicación de resultados correspondiente al tercer trimestre de 2018, la sociedad facilitará información completa de dicho impacto».
El grupo, con 7.388 tiendas repartidas entre España, Portugal, Brasil y Argentina, cerró 2017 con un beneficio de 109,6 millones de euros (un 37% menos que un año antes) y su facturación neta se contrajo un 0,56%, hasta los 8.620 millones de euros.
En aquel momento marcaban que la inflación argentina les había jugado en contra a sus resultados finales. Pero ahora, sin lugar a dudas, el panorama es de cifras aún peores. En este contexto y como consecuencia de la difícil situación que atraviesa el grupo, el directorio decidió dejar en suspenso el reparto de dividendos para el próximo ejercicio 2019.
Finalmente, la jornada de hoy será clave porque la acción de la firma, de seguir con la tendencia de ayer lunes, podría alcanzar valores de menos de 1 euro y el mercado mira esto con especial atención.
Ámbito Financiero